lunes, 30 de enero de 2012

El reconocimiento de la Guerra: Aforismos

"La errancia gobierna este abandono. Vagamos. Vagamos entre las ruinas de la civilización; y precisamente porque se encuentra en ruinas, no nos será dada la posibilidad de enfrentarla. Es una guerra bien curiosa esta en la que nos hallamos comprometidos. Una Guerra que requiere que se creen mundos y lenguajes, que abran y ofrezcan lugares, que se constituyan hogares, en medio del desastre".
Coordenada de "Llamamiento y otros Fogonazos".

He decidido comenzar a despilfarrar ciertas ideas que desde hace algún tiempo vengo guardando para mí. Se me hace bastante difícil construir un hilo conductor para estos pensamientos pues van y vienen. Pienso por tanto, que es posible definir ciertos aforismos que puedan generar ciertas reflexiones, capaces de entrelazarse sin un orden lineal. Esto me ayudaría bastante a lograr expresarlas.
La mayoría de estos aforismos, surgen de una idea que desde hace algún tiempo vengo acuñando: La Guerra.
Intento referirme a La Guerra en el sentido del quiebre, en el sentido de la destrucción de una estructura. La guerra que deviene de la Lucha de una especie contra su ambiente, de la lucha entre sus miembros, de la lucha de la consciencia individual ( colectiva y multi dimensional), la guerra sobretodo - y al final - por la libertad nunca conquistada.
Con esto no se pretende exponer reflexiones conciliadoras acerca de la Guerra, todo lo contrario; sobretodo es un deber, definir una postura, asumir una condición, y desde esa condición comenzar a plantear las preguntas.
Estos aforismos apuntan a eso, reflexionar, generar golpes, resonar en nuestros valores, en nuestros miedos, confrontar, para luego volcarse en nuestra identidad, que siempre está en proceso de construcción.

2 comentarios:

Constanza Ipinza Olatte dijo...

si la libertad nunca ha sido conquistada, es probablemente porque las cadenas están en los propios internos del ser humano.

Yo creo a diferencia tuya amigo, que la libertad sí ha sido conquistada por algunos, sólo que en nuestro mundo occidental, los parámetros son tan confusos, que aquella palabra, "libertad", es una errata que confunde y desconcierta, ante las estructuras de las sociedades.

Yo me pregunto, como se anhela libertad, si somos incapaces de valernos por nosotros mismos, si ni siquiera conocemos con certeza la cadena de los alimentos, si llenamos nuestras despensas de productos que muchas veces ni siquiera sabemos su procedencia, y por lo tanto, satisfacemos nuestros cuerpos y nuestra mentes, con químicos que quien sabe cuanto influyen en nuestro comportamiento.
Además de eso, bebemos el agua de la llave, que contiene fluor, afectando según los entendidos directamente a la glándula de la hipófisis, y le permitimos a otros, como la política y la prensa, el control mediático de lo que pasa a nivel mundial y nivel local...

Nosotros mismos, arquitectos, diseñamos espacios para que la gente se mueva o viva de determinada manera, y así, el circulo vicioso sigue y avanza...

Es imposible que no haya guerra con tanta ceguera en este mundo, pero la guerra está perdida si cada ser humano no es consciente de lo que nos estamos haciendo a nosotros mismos.

Por último, la filosofía que he encontrado, e intento hacerla mía, para soslayar los miedos que cada uno trae sobre la espalda, es que la revolución comienza por la cuchara, luego de eso, viene todo lo demás.

"Para conquistar primero, gobiernate a ti mismo"

DMO dijo...

Querida Constanza, no puedo más que concordar con lo que dices. Es precisamente la Guerra, la Guerra con nosotros mismos, la que debe refutar nuestra consciencia, nuestros hábitos, nuestra forma de observar y entender el mundo la que es más importante. Esa revolución es la Guerra más necesaria, la que culmina con la destrucción que hace libres a los hombres, esa guerra contra los afectos, contra las palabras, contra nosotros, la guerra del individuo, del electrodo, de los yogures caducados, de la imposible apropiación de la vida. Es una Guerra que tal como tú dices, otros han conquistado, otros que hemos observado atónitamente como espejismos de los que no hemos aprendido nada.
Gracias por escribir , muchos cariños para ti.
Zouk